Autor: Sealtiel Enciso Pérez
En la esquina de las calles Aquiles Serdán y Nayarit, en la ciudad de La Paz, se erige la escuela secundaria "David Peralta Osuna". En su interior, frente a la plaza cívica, se encuentran tres bustos que rinden homenaje a destacados directores que dejaron una huella imborrable en la institución. Estos bustos son el testimonio tangible del legado y la dedicación de estos maestros en la formación de generaciones de estudiantes.
El primero de ellos es el busto del Maestro Miguel Liera Ibarra, quien fue el fundador de la Escuela Secundaria Nocturna Federal No. XLVIII, a la cual posteriormente se le otorgó su nombre en reconocimiento a su incansable labor educativa. El Maestro Liera Ibarra fue un pilar en la creación y desarrollo de la escuela, brindando oportunidades de estudio a aquellos que buscaban superarse en horarios nocturnos. Su busto, colocado sobre una base alta en forma de horquilla invertida, representa su dedicación y compromiso con la educación.
El segundo busto es el del Maestro Marcelo Rubio Ruiz, quien sucedió al Maestro Liera Ibarra como director de la escuela. Durante su gestión, el Maestro Rubio Ruiz trabajó arduamente para gestionar y construir nuevas instalaciones que permitieran mejorar las condiciones de enseñanza y aprendizaje. Su liderazgo visionario contribuyó al crecimiento y desarrollo de la institución. El busto del Maestro Rubio Ruiz se encuentra junto al de su predecesor, en una base similar, simbolizando la continuidad de su labor educativa.
El tercer busto es el del Maestro David Peralta Osuna, quien fue director del turno nocturno y posteriormente se convirtió en el primer director del turno matutino en la escuela. Su compromiso con la educación y su dedicación a la formación de los estudiantes dejaron una profunda huella en la institución. El busto del Maestro Peralta Osuna, también colocado sobre una base alta en forma de horquilla invertida, representa su liderazgo y su contribución al crecimiento de la escuela secundaria.
Estos tres bustos, erigidos con orgullo por las nuevas generaciones de catedráticos y alumnos, son un recordatorio constante de la importancia de la educación y del legado dejado por estos destacados directores. Además de honrar su memoria, los bustos sirven como inspiración para las futuras generaciones, recordándoles la importancia de la dedicación, el compromiso y el amor por la enseñanza.
La ubicación estratégica de estos bustos en la entrada de la escuela secundaria es un símbolo de su importancia y su influencia en la vida de la comunidad educativa. Los estudiantes, al pasar por ellos a diario, tienen la oportunidad de reflexionar sobre el valor de la educación y el impacto que pueden tener en la sociedad como futuros profesionales.
Los bustos de los Maestros Miguel Liera Ibarra, Marcelo Rubio Ruiz y David Peralta Osuna son un testimonio elocuente del legado y la dedicación de estos destacados directores en la escuela secundaria "David Peralta Osuna". Estos monumentos son un recordatorio constante de la importancia de la educación y de la labor docente, inspirando a las generaciones presentes y futuras a seguir su ejemplo y continuar construyendo un futuro prometedor a través del conocimiento y la enseñanza.
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